El director Hong Won-Chan, que ha pasado de guionista de películas como The Cheaser a director, da su estreno a su película de título original O Piseu, donde se puede ver un trasfondo de la sociedad oriental asiática, mostrando el gran agobio al que se les somete para ascender de cargos empresariales o para ocuparse de informes que deben estar listos al día siguiente sí o sí habiendo sido avisados esa misma mañana, por ejemplo. En esta situación podemos ver a una de las protagonistas, becaria de la empresa, llamada Lee Mirae, que sufre el desprecio de sus compañeros con cargos superiores por el simple hecho de que se esfuerza lo indecible para cumplir las órdenes que le llegan.
Las primeras escenas que te dirigen hasta la muerte de la familia Byung-guk te desorientan un poco, ya que no te ponen en situación para la realización de esa masacre. Es cierto que el propio film es un enredijo de relaciones entre compañeros y de situaciones, ya que se entremezclan los interrogatorios realizados por la policía a los miembros de la empresa, el flirteo que intenta llevar a cabo el inspector con la becaria y las escenas de oficina. Lo bueno es que ha sabido hilar todo ese conjunto de escenas en un orden secuencial con bastante sencillez, a veces un poco más forzado, cosa que es difícil de evitar.
El final, inesperado. Con una gran trama y argumentación, donde se ve el fondo que quiere conseguir el director llevando el thriller al lado fantástico, principio de este festival. Puedo decir que es una película que da sustos más que de miedo, aunque también hay que aclarar que la que escribe es una miedica en toda regla y que no hace falta mucho para que parezca que se le va a salir el corazón; así que a los que les guste el miedo, solo notarán suspense y tensión.
La actriz protagonista Ko A-sung ha ganado el premio a mejor actriz de este festival de Cine Fantástico, y lo tiene muy merecido por el gran papel que realiza, manteniendo con gran facilidad el suspense y escondiendo grandes detalles de la película.
Los demás actores que representan empleados de oficina también desarrollan bastante bien el eje de la película, ya que sin ellos, no se vería la presión a la que están sometidos, propio de la sociedad de aquella zona como hemos mencionado antes.
Los policías que aparecen intentan encontrar al fugado trabajador, pero al inicio del film se nota como no ponen en ello todo su entusiasmo o su dedicación, y tras varias críticas que llegaron a los jefes, retomaron el caso con muchísimas más ganas, llegando a indagar más en la vida personal de cada empleado para intentar llegar al responsable de todos los acontecimientos que sucedían en esa oficina.
También se puede apreciar al principio de la película como la empresa no quiere que se relacione el asesinato de la familia con su empleado, porque eso llevaría mala fama a la empresa y es preferible que no saliese a la luz.
En mi opinión, el film te deja enganchado hasta el final, sobre todo porque entre la protagonista y el segundo personaje más relevante hay mucha confusión. Sin duda, ha sido una de las mejores películas de esta edición del festival. Os recomiendo que la veáis porque no os va a dejar indiferentes; incluso para los más miedosos, a los que aviso de que solo se dan “sustitos” en lo que taparse los ojos cuando realmente no pasa nada.
Tenía grandes papeletas para ganar el certamen, aunque finalmente lo hizo Tag, original de Japón, que sigue un tema parecido, caracterizado por lo sangriento.
Artículo publicado originalmente en Ákrox